21-12-06 Light my fire
Buenos días a todos y a todas. Hay una verdad universal, inequívoca y absoluta: El mundo se divide en dos clases de personas, los que roban mecheros y los que se quedan sin ellos. ¿Es o no es?
El caso es que todos podemos subdividir a nuestros amigos y conocidos en esas dos categorías, y además es imposible pertenecer a ambas, o sea, o eres de los que roban mecheros o eres de los que se quedan sin ellos.
Pongamos que salimos de casa para tomar algo con los amigos, y como ya sabemos que algunos de ellos tienen una particular inclinación a quedarse con los mecheros de los demás, pues llevamos dos mecheros, uno que compramos durante las vacaciones, de color amarillo fosforito, con un burro dibujado que pone “Recuerdo de Benalmádena” y otro de propaganda, de color rojo puticlú, en el que aparece un tipo con una llave inglesa y que dice “Talleres mecánicos Amadeo Ruipérez (Calamonte) les desea feliz navidad y próspero año nuevo”. Bueno, pues al cabo de dos horas, fijo que no tenemos ninguno y tenemos que pasarnos el resto de la noche pidiendo fuego a los colegas... y lo curioso es que ninguno de los colegas saca un mechero “recuerdo de benalmádena” ni tampoco el de los talleres Ruipérez ¿qué ha sucedido? Pues sencillamente que el mechero está en esos momentos en una fase previa al cambio de propiedad, en una especie de limbo bolsillero en el que aún no ha cambiado de manos pero en el que está a punto de pasar a manos de tu colega, el robamecheros enmascarado, que llegará a casa al amanecer, vaciará sus bolsillos y allí estarán todos los mecheros con los que se ha quedado esa noche. Nuestro amigo dirá en ese momento “coño, pero si yo salí sin mechero y tengo ahora unos quince ¿de dónde habrán salido?” y los meterá en un cajón para ir tirando de ellos según los necesite.
Todos sabemos quién o quienes son los robamecheros de la pandilla, pero nunca decimos nada porque realmente ni siquiera tenemos pruebas y en este país existe eso de la presunción de inocencia (salvo para algunos periódicos y emisoras de radio). Afortunadamente sabemos que el mechero volverá a nuestras manos, porque el tiempo ha hecho que seamos conscientes del “Teorema del mechero boomerang”, que aún no está demostrado en laboratorio pero que funciona empíricamente en la mayoría de los casos.
El “Teorema del mechero boomerang” afirma que “Todo mechero robado en circunstancias misteriosas termina volviendo a su legítimo dueño tiempo después en circunstancias igualmente misteriosas ya que los mecheros ni se crean ni se destruyen, sino que simplemente cambian de manos de forma cíclica”, de tal modo que dos años después, cuándo estemos de vacaciones en Budapest, tomando algo en una terraza con una amiga Holandesa, de repente aparecerá en nuestra mesa, como por ensalmo, un mechero color rojo puticlú con un tío que enarbola una llave inglesa y que dice “Talleres Mecánicos Amadeo Ruipérez (Calamonte) les desea Feliz Navidad y próspero año nuevo” mientras que nuestra amiga holandesa nos dará fuego con un mechero amarillo fosforito con un burro dibujado que dice “Recuerdo de Benalmádena”.
Sean bienvenidos al programa que ni se crea ni se destruye. Sean bienvenidos a un día más de radio, sean bienvenidos a EL CANTO DEL GALLO.
En el programa han sonado: Ike and Tina Turner y Smash
Frase del día: "SU TABASCO... GRACIAS"
Video del día: NEIL YOUNG "LIKE A HURRICANE"
2 Comments:
Muy bueno jajaja
En mi oficina eso pasa con los bolis. Aunque le pongas al típico boli bic el nombre por dentro del tubo transparente da igual, al final te toca escribir con el cutre-imitación de bic que nadie quiere y que escribe a cachos.
sí, a los bolígrafos tengo que dedicarles un programa también jejeje
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